Un díalogo

Esto fue escrito con portaminas el 13 de octubre de 2007... no sé bien por qué pude haberlo escrito, ni bajo qué circunstancias, pero estaba escrito a mano, y actualmente me gusta. Ha lo grado hacer algo que no todo lo que escribí pudo: gustarme después de un tiempo.

Este es el arte olvidado

De las palabras ciegas y los dolores vanos

De cielos y silencios, de dolores y tormentos

Quiéreme como yo te quiero

Olvídame como ya te he olvidado

Siénteme en mi mano, ¿no ves que muero?

El corazón ha dado su último toque

Las campanas de la noche suenan incesantes

Finalmente escribiste la sentencia con que llamaste

Al pobre Dios callejero entre los sueños.

Has maltratado los silencios

Has detonado las razones de la vida

Y te has quedado con ellas como secretos

Que guardas celosamente en tu seno

Ámame como yo te amo

Piérdeme, yo ya te he perdido.

Tienes que conocer el silencio y el dolor

Ver parir a la noche el sacrificio

Abandonarme a los infortunios de la vida

Tentar los crímenes que sacien mis más bajas pasiones

Y perderme en la eternidad de mis pensamientos

Siénteme como yo te siento

Aléjate de mí, yo por siempre te buscaré.